Hace unos meses, la ATM prohibió que se transportaran patinetes eléctricos y todo tipo de VMP en sus redes de transporte público en Barcelona por principios de seguridad. A día de hoy no ha terminado la propuesta de regulación sobre el acceso y seguridad de estos vehículos y alarga la restricción decretada en febrero.
Según ha explicado la ATM a través de un comunicado, la restricción continuará vigente hasta el próximo 31 de octubre, cuando está previsto que ya esté terminada la propuesta de regulación definitiva sobre el acceso y seguridad a estos vehículos.
Todo esto comenzó a raíz de un accidente que ocurrió el pasado 17 de noviembre con el transporte público en Barcelona, en el que un patinete eléctrico se incendiaba en un vagón de FGC, por lo que llevó al Consejo de Administración de la ATM a prohibir transportar los VMP dentro de sus vehículos de transporte público.
La decisión se tomó bajo el principio de seguridad preventiva que rige a los operadores en lo que respecta a la protección de los usuarios, al personal que trabaja en el servicio de transporte público y de sus instalaciones. Como consecuencia de la prohibición temporal, se han habilitado progresivamente plazas de aparcamiento de patinetes en las estaciones ferroviarias e intercambiadores de autobús y de transporte público para que los usuarios puedan depositar sus VMP. En este sentido, el Área Metropolitana de Barcelona ha permitido el aparcamiento de patinetes eléctricos y el resto de VMP en los Bicibox, que cuenta en la actualidad con 2.571 plazas.