Bird Global, conocida por ser pionera en el alquiler de patinetes eléctricos en entornos urbanos, ha presentado una declaración de bancarrota bajo el Capítulo 11 en un tribunal de Florida. Esta decisión surge tras meses de incertidumbre y desafíos, atribuyendo la compañía su declive a la combinación de la crisis económica mundial y las regulaciones impuestas por varios países en los que opera. Financial Times informa que Bird planea llevar a cabo una reestructuración financiera con el respaldo de un grupo de prestamistas, aspirando a recaudar $414 millones con el objetivo de concluir un proceso de venta en un plazo de 90 a 120 días.
A pesar de la bancarrota, Bird ha asegurado que mantendrá sus operaciones de manera normal durante el proceso de reestructuración, garantizando la continuidad del servicio para sus usuarios y administradores de flotas. La compañía, que ha enumerado activos y pasivos en un rango de $100 a $500 millones de dólares, tiene como objetivo principal ajustar su estructura de capital para avanzar hacia la rentabilidad. Michael Washinushi, director ejecutivo interino de Bird, ha subrayado el compromiso continuo de la empresa con su misión de hacer que las ciudades sean más habitables mediante la promoción de la micromovilidad para reducir el uso de automóviles, el tráfico y las emisiones de carbono.
La bancarrota de Bird ocurre en un momento en el que los patinetes eléctricos han perdido relevancia y enfrenta desafíos adicionales después de despedir a empleados y retirarse de varios países en el transcurso de 2022. La prohibición del alquiler de patinetes en París este año, debido a quejas ciudadanas sobre el desorden causado por su abandono en las calles, también ha impactado negativamente en la empresa. Este episodio marca un hito crítico para Bird, que, tras cinco años de convertirse en el emprendimiento más rápido en alcanzar una valoración de $1,000 millones, ahora encara un proceso de reestructuración y ajuste para superar los desafíos económicos y regulatorios que ha enfrentado en los últimos años.
