En esta época del año mucha gente se cuestiona sobre si puede conducir con su patinete eléctrico durante la lluvia y si este es resistente o se dañará. Hoy te detallamos cómo funcionan estas protecciones y las precauciones que debes de tener ante situaciones mojadas.
La mayoría de los patinetes eléctricos son tolerantes a las condiciones normales de polvo y suciedad, incluso cuando no se les otorga una clasificación IP, aunque no se recomiendan los entornos extremos como las tormentas de polvo. Sin embargo, no todos los patinetes eléctricos son resistentes al agua y no es aconsejable conducirlos bajo la lluvia por lo complicado que se dificulta la conducción.
Patinetes resistentes a la lluvia
Algunos patinetes como el popular Xiaomi M365 (y los nuevos 1S, PRO2, PRO y Essential) cuentan con certificación IP54 que los hace resistente al agua y a prueba de polvo. Con esto nos podemos asegurar que nuestro patinete va soportar ligeramente una lluvia leve, además estos patinetes de Xiaomi tienen una construcción de alta calidad, con muy buenas soldaduras y una plataforma antideslizante.
Pero nada lejos de la realidad, pues recordemos que estos patinetes NO son 100% estancos, y podría entrar agua por algunas zonas. Normalmente el primer componente afectado es la pantalla, que entre los huecos del botón de power, se puede colar agua y provocar un funcionamiento anómalo del patinete, incluso cortocircuitar la placa. Para ello recomendamos comprar un protector de pantalla como este, que por menos de 1€ te puede salvar de una buena reparación. También recomendamos un protector para la cubierta inferior del patinete como este.
Algunos fabricantes como Kaboo muy conocido por su modelo Mantis, no proporcionan una clasificación de IP. Esto no significa que el patinete no sea resistente al agua o no esté protegido del polvo. Por norma general, los patinetes sin clasificación IP pueden viajar con lluvia ligera durante períodos cortos y están protegidos de las salpicaduras y el polvo (similar a IP54), pero no se recomienda conducirlos durante períodos prolongados con lluvia intensa.
Otro ejemplo podría ser el EMOVE Cruiser, que cuenta con una clasificación IP67, la más alta que se ha probado, y está particularmente bien hecho para resistir y montar en todas las condiciones. El Cruiser no solo está diseñado para sumergirse bajo el agua (aunque no lo recomendamos), sino que muchos de los cables son plug-and-play, lo que facilita el reemplazo de las luces, la pantalla LED u otros componentes en caso de que funcionen mal.
Revisar el patinete
Antes de salir en tiempos de lluvia, observa de cerca todos los componentes de tu patinete y cómo están ensamblados. Examina cómo se encaminan los cables hacia el interior o a lo largo del mástil, si hay agujeros abiertos a lo largo de la plataforma, dónde se unen las piezas y qué tan apretadas están estas. Este pequeño análisis puede ayudarte a determinar la resistencia a la intemperie del patinete eléctrico.
Para los más manitas, recordar que algunos patinetes se pueden impermeabilizar con masilla de silicona y otras modificaciones bastante simples que pueden hacerlos más adecuados para estos climas. Recomendamos usar un sellador como este en spray para las juntas del cableado y otros componentes.
¿Entonces, puedo conducir bajo la lluvia?
La mayoría de los patinetes eléctricos están clasificados como IPx4 y se pueden conducir con lluvia ligera sin problemas. Incluso aquellos sin una clasificación oficial a menudo pueden tolerar al menos una lluvia ligera. Pero pocos patinetes pueden sobrevivir sumergidos en el agua.
Para determinar si es seguro conducir bajo la lluvia, es mejor buscar la clasificación IP, que debe proporcionarse en las instrucciones y en la ficha técnica. Si el patinete tiene una clasificación mínima de IPx4, puede conducirlo con lluvia ligera. Si tiene una clasificación más alta, como IPx5, IPx6 o IPx7, puede tolerar más lluvia durante más tiempo o incluso una inmersión completa.
Y siempre recuerda que aunque tu patinete sea resistente al agua y lluvia, es muy importante saber que cuando conduces bajo entornos lluviosos las ruedas pierden adherencia a la calzada, los frenos no son tan efectivos, la visibilidad se reduce y que nuestra integridad se pone en peligro por lo fácil que es perder el control.